Qué prontito se te olvidaron los primeros amores, el sacapuntas, comer plastilina, las pataletas, pedir salir a la chica que te gusta, las leches y las galletas… Un adulto ya no tiene tiempo para eso ¿verdad? Ya lo dijo Gómez de la Serna: 'Cuando estamos mirando el abismo de la vejez, los niños vienen por detrás y nos empujan...' -'¡Mira niño, empuja a tu padre…!' Reivindica tu tiempo, tus costumbres… ríete, emociónate, recuérdate, pero no te relajes: mírala a la cara y dile ¿Quieres salir conmigo?.