Ser joven y despreocupado en medio de un paisaje idílico de la Italia bañada por el sol de finales de los 50: esa es la dolce vita que Tom Ripley (Matt Damon) anhela, y que Dickie Greeleaf (Jude Law) disfruta. Cuando el padre de Dickie, un adinerado constructor de barcos, pide a Tom que traiga de vuelta a casa, a América, a su hijo, éste y su bella y expatriada compañera, Marge Sherwood (Gwyneth Paltrow), nunca hubieran sospechado a qué peligrosos extremos llegaría Ripley con tal de convertir el estilo de vida de la pareja en el suyo propio. Al fin y al cabo, es mejor ser una falsa persona importante que un don nadie auténtico.