Álex (Eduard Fernández), un hombre tímido e introvertido, es un director de cine que intenta terminar la escritura de su último guión. Decide alejarse unos días de su mujer e hijos para ir a los Pirineos y buscar allí la calma y la inspiración. En el pueblo en el que está conoce a Mónica (Montse Germán), una violinista que está de vacaciones en casa de una amiga. El amor crece entre ellos y tendrá que afrontar sentimientos que tiene que controlar y esconder. Sentimientos que quizá nunca expresará.